PROBLEMÁTICA ACTUAL EN EL SECTOR DEL TRATAMIENTO DE LA MADERA CON SALES DE HIDROSOLUBLES

En los últimos años han proliferado los casos donde madera tratada expuesta a una clase de uso 4 (en contacto con agua dulce y/o suelo) no ha superado una vida de servicio más allá de los 3-6 années. Esta durabilidad está muy por debajo de las expectativas del usuario, del impregnador (que emite garantía) y del propio fabricante del producto protector. Toto ello ha conducido a incrementar la desconfianza hacia este tipo de productos de madera tratada y a la aparición de un debate intenso en el sector.

Con este artículo el sector pretende lanzar una serie de reflexiones para ser capaces de poder hacer un análisis sosegado y objetivo de las posibles causas que han propiciado la aparición de casos realmente alarmantes no sólo en España (Andalucía, Galicia, Castilla León, Cataluña,) sino en varios países europeos como Francia e Italia.

Los factores que más pueden influir en que la madera expuesta a una clase de uso 4 no se comporte adecuadamente se resumen en tres:
• el tipo de producto protector,
• la calidad de tratamiento
• la zona donde se expone la madera tratada.

Cuando ocurren estos fenómenos de degradación acelerada, lo primero que uno piensa es, ¿pasaba esto antes? La respuesta a mi juicio es que sí, aunque no tanto como ahora, afirma Oriol Munné. Siempre se han dado casos puntuales de tener que reponer un % de material tratado por sufrir problemas de comportamiento en servicio. Esto podía deberse a varios factores, pero en general se atribuía a una mala calidad en la impregnación del elemento (por el tipo de madera, proceso de tratamiento, etc.). En cualquier caso, las incidencias de este tipo nunca habían trascendido tanto como ahora (en número de casos y en % de elementos de madera afectados), lo cual hace entrever que esto es nuevo y relevante.

Otra pregunta frecuente (aunque puede conducirnos a conclusiones precipitadas y erróneas si somos demasiado simplistas) es, ¿qué ha cambiado durante este tiempo?

Basándonos en los 3 factores clave mencionados, el único que probablemente ha cambiado de manera más significativa es el tipo de producto protector. Si miramos hacia atrás, a menos de 10 años vista, encontramos la retirada definitiva de las famosas sales CCA, muy empleadas y reconocidas como el producto de referencia y de confianza por el sector. Los productos que han proliferado desde entonces han sido mayoritariamente sales libres de cromo (aunque el cromo aún persiste en el mercado), combinando habitualmente diferentes fuentes de cobre con amonios cuaternarios.

Dentro de los casos recientes de fallos en el comportamiento de la madera tratada, no se han detectado maderas tratadas con sales CCA, y se puede decir que no ha habido ningún producto alternativo que predomine dentro de los casos graves detectados. Como consecuencia de los casos ocurridos, centros de referencia que establecen dentro de sus marcas de calidad, indicaciones sobre la retención de producto eficaz, se han visto obligados en algún caso a incrementar las retenciones recomendadas más de un 60%.

Es habitual cometer el error de pensar que el producto protector es el único responsable de los casos de fallo.

Una madera adecuadamente tratada es aquella donde el producto ha penetrado a la mínima profundidad requerida y presenta una cantidad de producto por unidad de volumen (retención) igual ó superior a las especificación del fabricante. Para determinar la calidad de un lote de madera tratada deberá seguirse un plan de muestreo según norma Europea y proceder a los análisis anteriormente citados. La realidad del sector refleja una deficiencia importante en cuanto a la determinación de la calidad de la madera tratada. Ainsi, nunca puede atribuirse la responsabilidad del fallo sólo al producto si no conocemos la calidad del tratamiento. En los laboratorios de TECNALIA (Laboratorio asociado a ANEPROMA), dans 2010 se analizaron un total de 3.426 muestras de madera tratada con sales de cobre, distribuidas en varios lotes. Los resultados de los análisis de penetración mostraron resultados negativos en un total de 1.729 muestras (clase de penetración obtenida inferior a NP 5 según norma EN 351:2008). Esto supone que cerca del 50% de las muestras estaban deficientemente tratadas. Esto de alguna manera, pone en evidencia la credibilidad de la calidad de la madera tratada del mercado.

Enfin, las características del emplazamiento donde se expone la madera tratada será determinante en la velocidad y capacidad de la biodegradación. Las condiciones meteorológicas, el tipo de suelo, la presencia de ciertos microorganismos, etc.. pueden propiciar y acelerar la neutralización de las materias activas de los productos. En muchos casos se ha dado la circunstancia de que los hongos presentes en el terreno conflictivo presentaban una alta resistencia a los compuestos cúpricos, lo que ha hecho reaccionar a la industria de los productos protectores en busca de soluciones que puedan cubrir mayor abanico de riesgos.

En base a lo anterior pueden extraerse multitud de conclusiones, aunque de manera general coincidiremos en que el problema es multifactorial. La calidad de la madera en el mercado no se controla de manera suficiente y hay indicios significativos que reflejan una más que dudosa calidad de la madera tratada para clase de uso 4. Aunque no hay datos suficientemente robustos en este sentido y tampoco hay datos sobre la calidad de la madera tratada hace 20 années, se considera probable que no se haya visto modificada de manera significativa en este periodo de tiempo. Ainsi, todo parece indicar que la nueva generación de productos del mercado, aunque con plenas garantías de comportamiento, requieren más cuidado y rigurosidad en el proceso de impregnación de la madera. La posible proliferación de hongos tolerantes al cobre, especialmente en zonas agrícolas que han sido expuestas reiteradamente a fungicidas en base cobre puede también haber influido en la casuística de casos publicados y deberá estudiarse si esto constituye un fenómeno creciente o no.

Oriol Munné Dtor.Madera-Biotek TECNALIA R&I